A raíz de que en el municipio de Cala Varques se ha prohibido la práctica del psicobloc y en la comuna de Bunyola se ha empezado a cobrar 10€ por escalar en la zona de Fraguels, un grupo de escaladores mallorquines ha escrito este manifiesto en el que explican los motivos por los que "los escaladores no estamos dispuestos a pagar por disfrutar de la libertad de escalar en la naturaleza".
CONTRA LAS PROHIBICIONES Y EL PAGO DE TASAS POR ESCALAR EN MALLORCA
Si estás a favor de esta iniciativa puedes firmar la petición en:http://www.change.org/petitions/sierra-de-tramuntana-libre-de-impuestos
También puedes copiar el texto que viene a continuación y reenviarlo a esta dirección:
CONTRA LAS PROHIBICIONES Y EL PAGO DE TASAS POR ESCALAR EN MALLORCA
La isla de Mallorca es un destino vacacional reconocido mundialmente por la comunidad internacional de escaladores por la calidad de sus entornos naturales apropiados para la práctica de este deporte.
La isla de Mallorca es referencia mundial para la práctica de la modalidad de escalada conocida como Psicobloc, también denominada Deep Water Solo. Modalidad que ha sido prohibida en el Municipio de Manacor durante el verano 2013, especialmente en la playa de Cala Varques, mundialmente conocida como lugar de referencia para la práctica de esta modalidad deportiva.
Menos conocida internacional y nacionalmente es la calidad de la sierra de Tramontana para la práctica de la escalada deportiva pues, dada la problemática que surge alrededor de la titularidad privada de las fincas donde se localizan las zonas apropiadas para su práctica, no se ha hecho difusión de ellas.
Desde el colectivo de escaladores locales somos plenamente conscientes de las dificultades que entraña esta situación y en la medida de lo posible evitamos divulgar las localizaciones de los entornos útiles para la práctica de la escalada deportiva, en un intento de eludir su prohibición. A pesar del secretismo, anualmente centenares de escaladores vienen de todas las partes del planeta a disfrutar de la escalada en las costas y sierras mallorquinas.
Desde el colectivo de escaladores locales no entendemos la situación que estamos empezando a vivir el la isla. Y la perspectiva de futuro no es muy alentadora.
Como consecuencia de la declaración de la sierra de Tramontana Patrimonio Mundial de la Unesco en 2010 estamos viviendo una fiebre que tiene como síntoma principal el ansia recaudatoria y ofrece como remedio la imposición de tasas a la práctica de actividades deportivas.
El medicamento parece que tiene que salir de los bolsillos de un raro y vulnerable colectivo: los escaladores. Un colectivo completamente desconocido e invisible para las administraciones. Pues no nos conocen, porque solemos andar por los terrenos más inaccesibles de montañas y costas marinas, siempre buscando terrenos verticales, escarpados y alejados de la civilización. Estamos acostumbrados a vivir en la montaña, frontera que en este momento de la historia supone el último reducto para respirar la libertad. La montaña es nuestro refugio.
Aquí y ahora en la isla de Mallorca quieren iniciar un procedimiento para hacernos pagar por su avaricia, quieren que paguemos por ejercer un derecho fundamental del hombre: respirar en los espacios de montaña. Algo que hasta ahora no se había producido en ningún lugar de Europa.
La isla de Mallorca es referencia mundial para la práctica de la modalidad de escalada conocida como Psicobloc, también denominada Deep Water Solo. Modalidad que ha sido prohibida en el Municipio de Manacor durante el verano 2013, especialmente en la playa de Cala Varques, mundialmente conocida como lugar de referencia para la práctica de esta modalidad deportiva.
Menos conocida internacional y nacionalmente es la calidad de la sierra de Tramontana para la práctica de la escalada deportiva pues, dada la problemática que surge alrededor de la titularidad privada de las fincas donde se localizan las zonas apropiadas para su práctica, no se ha hecho difusión de ellas.
Desde el colectivo de escaladores locales somos plenamente conscientes de las dificultades que entraña esta situación y en la medida de lo posible evitamos divulgar las localizaciones de los entornos útiles para la práctica de la escalada deportiva, en un intento de eludir su prohibición. A pesar del secretismo, anualmente centenares de escaladores vienen de todas las partes del planeta a disfrutar de la escalada en las costas y sierras mallorquinas.
Desde el colectivo de escaladores locales no entendemos la situación que estamos empezando a vivir el la isla. Y la perspectiva de futuro no es muy alentadora.
Como consecuencia de la declaración de la sierra de Tramontana Patrimonio Mundial de la Unesco en 2010 estamos viviendo una fiebre que tiene como síntoma principal el ansia recaudatoria y ofrece como remedio la imposición de tasas a la práctica de actividades deportivas.
El medicamento parece que tiene que salir de los bolsillos de un raro y vulnerable colectivo: los escaladores. Un colectivo completamente desconocido e invisible para las administraciones. Pues no nos conocen, porque solemos andar por los terrenos más inaccesibles de montañas y costas marinas, siempre buscando terrenos verticales, escarpados y alejados de la civilización. Estamos acostumbrados a vivir en la montaña, frontera que en este momento de la historia supone el último reducto para respirar la libertad. La montaña es nuestro refugio.
Aquí y ahora en la isla de Mallorca quieren iniciar un procedimiento para hacernos pagar por su avaricia, quieren que paguemos por ejercer un derecho fundamental del hombre: respirar en los espacios de montaña. Algo que hasta ahora no se había producido en ningún lugar de Europa.
Digámosles en masa a los políticos y burócratas de Mallorca que los escaladores no estamos dispuestos a pagar por disfrutar de la libertad de escalar en la naturaleza.
Por lo tanto, queremos decir:
- Los escaladores no estamos dispuestos a tener que solicitar una autorización a la administración publica, para la practica de la escalada en Mallorca. Autorización que supone que se nos incluya en un censo, con el objetivo de valorar el potencial económico que surgiría, de cobrarnos una tasa por ejercer el derecho a escalar libremente en la montaña.
- Los escaladores no estamos dispuestos a tener que pagar hasta 10 euros por persona y día por escalar en algunas zonas de la isla de Mallorca. Tarifa que únicamente nos da derecho a respirar en las zonas de escalada. Zonas que históricamente han sido acondicionadas y financiadas únicamente por acciones individuales del colectivo de los escaladores.
- Los escaladores nos oponemos a la prohibición indiscriminada y al cierre de zonas de escalada cuando su cierre no haya surgido de una negociación consensuada entre la federación de montaña y la administración.
- Los escaladores sí estamos a favor de la regulación de la escalada de manera pactada para garantizar la protección de los usos compartidos entre escaladores, flora y fauna, de manera que se garantice la protección de las especies animales y vegetales junto a la práctica de la escalada deportiva. Bajo criterios medioambientales no especulativos y de seguridad.
- Los escaladores solicitamos a la administración pública que favorezca a los propietarios de las fincas privadas donde se pueda practicar la escalada deportiva, concediéndoles el privilegio de poder acondicionar algún tipo de camping, refugio o albergue de montaña. Con el objetivo de que el colectivo internacional de escaladores pueda viajar hasta la isla de Mallorca de manera ordenada, a disfrutar del enorme potencial que ofrece la isla para la práctica de este deporte. Tal y como se realiza en otros sitios de España y de Europa, así como en el resto del mundo, de manera que podamos simplemente pagar por servicios tales como pernoctar y comer, como el resto de personas que viajan y viven en Mallorca.
- Solicitamos dar fin a la actual situación en la que los propietarios de fincas privadas se encuentren con la imposibilidad de desarrollar un negocio ligado al turismo de montaña como consecuencia de las trabas administrativas. La solución que nos proponen en algunas zonas de escalada de Mallorca, debido a la afluencia de escaladores y excursionistas, es la de pagar entre 4 y 6 euros por persona y día, dependiendo de la residencia balear o foránea. Simplemente por el derecho a acceder y respirar dentro de su propiedad, algo que precisamente sirve más como una medida disuasoria hacia los visitantes que como una medida atractiva para el desarrollo del turismo de montaña y deporte.
Si estás a favor de esta iniciativa puedes firmar la petición en:http://www.change.org/petitions/sierra-de-tramuntana-libre-de-impuestos
También puedes copiar el texto que viene a continuación y reenviarlo a esta dirección:
Serradetramuntana@conselldemallorca.net
Y retweetearlo a estas direcciones:
Conselleria de Turisme i Esports del Govern de les Illes Balears
@TurismeEsportIB
@TurismeEsportIB
Agencia de Turismo de las Islas Baleares
@ATBIllesBalears
@ATBIllesBalears
Conseller de Turismo y Deportes del Govern de les Illes Balears
Palma de Mallorca
@carlosjdtruyols
Palma de Mallorca
@carlosjdtruyols
Pon tu nombre:
Apellidos:
Lugar de residencia:
Y este texto (o similar):
Hace años que conozco Mallorca como destino atractivo para la práctica de la Escalada. Tenía planeado viajar hasta la isla para disfrutar de unas vacaciones en las que practicar Psicobloc en sus acantilados marítimos. Y en la forma de Escalada Deportiva, en las zonas localizadas dentro de la sierra de Tramontana.
Al enterarme de la reciente prohibición de la práctica del Psicobloc y de que tendré que solicitar una autorización y pagar por escalar en las mejores zonas de la isla, he decidido cancelar mi plan de vacaciones.
Espero sean capaces de solucionar esta desagradable situación para nuestro deporte.
Apellidos:
Lugar de residencia:
Y este texto (o similar):
Hace años que conozco Mallorca como destino atractivo para la práctica de la Escalada. Tenía planeado viajar hasta la isla para disfrutar de unas vacaciones en las que practicar Psicobloc en sus acantilados marítimos. Y en la forma de Escalada Deportiva, en las zonas localizadas dentro de la sierra de Tramontana.
Al enterarme de la reciente prohibición de la práctica del Psicobloc y de que tendré que solicitar una autorización y pagar por escalar en las mejores zonas de la isla, he decidido cancelar mi plan de vacaciones.
Espero sean capaces de solucionar esta desagradable situación para nuestro deporte.
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